La planta del melón, melonera, se cree que es originaria de la zona que actualmente comprenden India, Pakistan y Kashmir.
Podemos hacer el plantel de meloneras a medidados de primavera, con las semillas que recolectemos de algún melón, para que en la época veraniega el Sol favorezca la maduración de los frutos.
Por ser una planta rastrera, la planta del melón ocupa un espacio considerable, podemos optar por el 'cultivo aéreo' utilizando tutores para guiar nuestras plantas, permitiendo a los melones colgar en el aire. Será nuestro objetivo reforzar el soporte del melón, este al estar literalmente colgando de la mata y no sufrir la presión del suelo al crecer lo hará con una forma más esférica.
Recomendamos macetas de 40 litros o mayor capacidad para cada melonera. En macetas de 20 litros la melonera también se desarrollará, pero el tamaño de los melones será más pequeño.
Existen diferentes técnicas a la hora de podar la melonera para maximizar su rendimiento. Os recomiento que experimenteis cada una de ellas siempre observando la reacción de vuestras plantas y recordad que por si sola la planta ya sabe como crecer.
Cultivar berengenas
Se cree que la berenjena es originaria del sudeste asiático.
Podemos recolectar las semillas de alguna berenjena que queramos reproducir, y guardarlas hasta el momento de la siembra, que suele realizarse a principios de primavera. Cosecharemos nuestras berenjenas durante el verano hasta el final del ciclo de la planta.
Al disponer de un sistema radicular grande, y ser una planta muy productiva, recomendamos macetas de 40 litros o superiores para cada ejemplar. También podemos tener nuestra planta de berenjena en una maceta de 20 litros, esto hará que la planta se adapte al tiesto produciendo un ejemplar más pequeño.
Necesitaremos tutores para que la planta pueda soportar el peso de los frutos favoreciendo así su crecimiento vertical.
No aplicaremos ningún tipo de pesticida ni remedio o abono no ecológico.
Podemos recolectar las semillas de alguna berenjena que queramos reproducir, y guardarlas hasta el momento de la siembra, que suele realizarse a principios de primavera. Cosecharemos nuestras berenjenas durante el verano hasta el final del ciclo de la planta.
Al disponer de un sistema radicular grande, y ser una planta muy productiva, recomendamos macetas de 40 litros o superiores para cada ejemplar. También podemos tener nuestra planta de berenjena en una maceta de 20 litros, esto hará que la planta se adapte al tiesto produciendo un ejemplar más pequeño.
Necesitaremos tutores para que la planta pueda soportar el peso de los frutos favoreciendo así su crecimiento vertical.
No aplicaremos ningún tipo de pesticida ni remedio o abono no ecológico.
Haz tu propio compost
Al contrario de lo que sucede con la actividad industrial con la que no paramos de contaminar el ecosistema produciendo todo tipo de residuos (gases tóxicos, metales pesados, plásticos, etc...), en la naturaleza no se producen residuos, los desechos de unos son alimento para otros.
Si arrancamos una 'mala hierba' tenemos que ser conscientes de que esa planta para formarse ha consumido una serie de recursos de la tierra y que cuando muera y se descomponga (por la acción de diferentes microorganismos y otros animalejos) volverá a formar parte del suelo en forma de nutrientes.
El compost se realiza preferiblemente a partir de restos de frutas, restos de verduras, cáscaras de huevo, restos de poda y todo tipo de materia vegetal en general. No se utilizan carnes o pescados para hacer compost casero, pues en su proceso de putrefacción se concentran bacterias no muy deseables para la salud humana. Éste se puede hacer con depósitos especiales.
Contra mayor sea el tamaño de la maceta en la que haremos el compost, mejor lo podremos remover y más cantidad de tierra podremos 'renovar'. La acción de remover se realiza para oxigenar la tierra y acelerar los procesos de mineralización.
Podemos guardar los restos de frutas y verduras en un tupper cerrado hasta que esté lleno y pasar a triturarlo con la batidora (añadiendo agua para que sea más cómodo), después lo vertemos en nuestra maceta-compostadora, removemos y a esperar. Podemos repetir este proceso tantas veces como sea necesario, teniendo en cuenta que las cáscaras de cítricos como la naranja y el limón aumentarán la acidez (ph) de nuestro sustrato.
Diferentes factores como la humedad, el olor, la esponjosidad, son indicadores de la calidad/estado de nuestro compost. Si tiene un olor a tierra del bosque y al apretarlo en la mano tiene textura esponjosa está listo. Si huele algo agrio, sería conveniente añadir más tierra y remover. Es conveniente que siempre tenga algo de humedad, sin necesidad de estar encharcado.
Diferentes factores como la humedad, el olor, la esponjosidad, son indicadores de la calidad/estado de nuestro compost. Si tiene un olor a tierra del bosque y al apretarlo en la mano tiene textura esponjosa está listo. Si huele algo agrio, sería conveniente añadir más tierra y remover. Es conveniente que siempre tenga algo de humedad, sin necesidad de estar encharcado.
Métodos de cultivo eficaces
Las semillas son pequeños seres vivientes durmiendo arropados en una cáscara seca, esperando a que llegue el momento de despertar y completar un ciclo que se repite desde hace millones de años.
Las plantas llevan en la Tierra muchos más años de los que nuestra mente puede imaginar, es por eso que tenemos mucho que aprender de ellas y, sin duda, somos muy ignorantes si creemos conocer los mejores y más eficaces métodos de cultivo, pues el mejor método de cultivo sería no utilizar ningún método de cultivo y permitir al ecosistema llegar a su equilibrio.
Las plantas llevan en la Tierra muchos más años de los que nuestra mente puede imaginar, es por eso que tenemos mucho que aprender de ellas y, sin duda, somos muy ignorantes si creemos conocer los mejores y más eficaces métodos de cultivo, pues el mejor método de cultivo sería no utilizar ningún método de cultivo y permitir al ecosistema llegar a su equilibrio.
Cultivar pimientos
La planta del pimiento es originaria de América.
Es una planta muy productiva. Las semillas se obtienen directamente de los pimientos que queramos reproducir. Así de sencillo.
Se puede comenzar el plantel de pimientos a principios de primavera y obtendremos el fruto desde mediados del verano hasta el final del ciclo de la planta. Se pueden recolectar los pimientos cuando están verdes o esperar a que maduren y se pongan rojos (en algunas especies los pimientos maduros son de color amarillo).
Recomendamos macetas de 40 litros o superiores para obtener ejemplares de 2 metros de altura. Se pueden plantar en macetas de 20 litros obteniendo plantas más pequeñas (1 metro aprox.) pero muy productivas también.
Necesitaremos tutores para favorecer un correcto crecimiento, ayudando así a la planta a soportar el peso de sus frutos.
No aplicaremos ningún tipo de pesticida ni remedio o abono no ecológico.
Es una planta muy productiva. Las semillas se obtienen directamente de los pimientos que queramos reproducir. Así de sencillo.
Se puede comenzar el plantel de pimientos a principios de primavera y obtendremos el fruto desde mediados del verano hasta el final del ciclo de la planta. Se pueden recolectar los pimientos cuando están verdes o esperar a que maduren y se pongan rojos (en algunas especies los pimientos maduros son de color amarillo).
Recomendamos macetas de 40 litros o superiores para obtener ejemplares de 2 metros de altura. Se pueden plantar en macetas de 20 litros obteniendo plantas más pequeñas (1 metro aprox.) pero muy productivas también.
Necesitaremos tutores para favorecer un correcto crecimiento, ayudando así a la planta a soportar el peso de sus frutos.
No aplicaremos ningún tipo de pesticida ni remedio o abono no ecológico.
Cultivar tomates
La planta del tomate, tomatera, es originaria de América.
Podemos plantar semillas previamente seleccionadas del tomate que queramos reproducir. Se puede realizar el plantel de tomates a finales de invierno o principios de primavera.
Recomendamos utilizar para cada tomatera una maceta de 40 litros o mayor capacidad, para conseguir tomateras de 2 metros de altura. Si no disponemos de tanto espacio podemos utilizar macetas de 20 litros, obteniendo plantas de 1 metro de altura.
No aplicaremos ningún tipo de pesticida ni remedio o abono no ecológico.
No hay nada más sabroso que un tomate recién cortado de tu propia planta.
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